La frase del dia

03 junio 2018

Viaje a los países Bálticos.



Aterrizamos en el aeropuerto de Riga (Letonia) después de cuatro horas de vuelo desde Barcelona. Cuando el avión comenzó a descender me sorprendió la gama de colores verdes y amarillos en las cercanías del aeropuerto. Nuestro grupo de viajeros no llegaba a las cuarenta personas con procedencia de distintos puntos de España  (Valladolid, Bilbao, Zaragoza, Mallorca y Tarragona, entre otros). Alguno tenía antepasados de Vilvestre y había una señora de San Sebastián que había nacido en Villavieja de Yeltes. Una vez más se confirma el dicho popular de que el mundo es un pañuelo. Eran las nueve de la noche cuando entramos en el hotel de Riga.
    A las cuatro de la mañana se colaba en plenitud la luz de la mañana. Riga (Letonia) es la ciudad con mayor población de los estados bálticos (700.000 habitantes). Acudimos a un mercado popular instalado en grandes hangares, había de todo, incluso jamones españoles y cerezas de Grecia (seis euros-kilo. Más bien parecía una mezcla de guinda y cereza). Hicimos un recorrido peatonal por el centro histórico a través de sus calles adoquinadas. No voy a detallar todo lo que vimos sino lo que considero más relevante, como la catedral gótica de Riga, ortodoxa, y también la católica de San Jacobo.
    (En la iglesia ortodoxa no se admiten imágenes tridimensionales para la veneración, como estatuas de santos, sino únicamente imágenes planas en pinturas o mosaicos, tradicionalmente llamados iconos. Las esculturas o bajorrelieves  que pueden verse en las iglesias ortodoxas sólo tienen función ornamental. Tampoco se utilizan instrumentos musicales, sino la voz humana)
     De nuevo subimos al autocar con rumbo a Estonia y visitamos la ciudad costera de Parnau antes de llegar a la capital Tallín (500.000 habitantes) capital de Estonia y distante de Riga a unos 300 kilómetros. En ambos lados de la carretera se sucedían los paisajes boscosos con pinos y abedules de altura espectacular. Del tronco del abedul extraen la sabia que mediante un proceso de elaboración beben en las fiestas. (Se calienta la savia con azúcar, levadura y limones. Esta mezcla se deja fermentar durante cinco días)
   A estos paisajes se sucedían inmensas llanuras verdes y amarillas (colza). En Tallín vistamos la catedral gótica luterana y el castillo de Toompea , sede del Parlamento Estonio. Continuamos con una visita al museo etnográfico Roca al Mare, enormes cabañas de madera con el tejado de cañas de centeno (¿?) y con vertiente a dos aguas. Merodeaban por allí estonios con vestidos de aquella época.
    El autobús nos llevó hasta en Valle de río Gauja, paseamos por el parque hasta el castillo de Turaida y visitamos una iglesia de madera y la gruta de Gutmanis, repleta de inscripciones y leyendas.
    El quinto día contemplamos el palacio de Rundale, una réplica del palacio de los zares de El Hermitage de San Petersburgo, que, aunque menor, irradiaba el lujo que acompañaba a los zares. Continuamos hasta Siauliai donde se halla la colina de las cruces, una loma atestada de crucifijos, cuyo origen se remonta al hecho de que los lituanos clavaron cruces en memoria de los lituanos muertos por la represión soviética de los zares. Los rusos destruyeron las cruces varias veces con máquinas excavadoras, pero los estonios continuaron repoblando la colina. Este lugar fue visitado por el Papa Juan Pablo II que dejó instalada una cruz y eso le dio repercusión mundial. Actualmente se estima que hay clavadas unas 400.000 cruces. El día que nosotros llegamos había una multitud de estudiantes elegantemente vestidos para celebrar su graduación. Es un lugar muy frecuentado por los lituanos para realizar sus promesas.
    El viaje nos llevó hasta Vilnius o Vilna, 500.000 habitantes (Lituania) para ver la catedral neoclásica y su centro histórico declarado patrimonio de la humanidad. Me sorprendió la iglesia barroca de San Pedro. Comentó el guía que en otro tiempo era de madera y allí resistió a la invasión soviética el lituano Mykolas Kazimieras Pacaso,  quien pidió en testamento que su féretro fuera llevado por prostitutas e indigentes como tributo a la vida mundana que había llevado y exigió ser enterrado bajo las escaleras de entrada porque no era merecedor de honor alguno.
    En Lituania no existe la cultura del famoso como en España, sólo el jefe de gobierno lleva guardaespaldas. Es fácil ver a miembros del gobierno, futbolistas o cantantes en los parques sin que nadie les moleste.
    Y no me voy a extender más porque cómo en otras ocasiones las imágenes y pie de foto son más explícitas que lo que yo pueda escribir. Hasta otra.




Mercado de Riga (Letonia)

Catedral de Riga

Tenía que probar las cerezas griegas. Nada que ver con las que hay en Corporario.

Biblioteca de Riga

Barrio de Art Nouveau en Riga

Barrio de Art Nouveau en Riga

Practicando por si algún día puedo navegar por el Duero en el Rostro.

Catedral ortodoxa de Riga, se santiguan dos veces seguidas y hacen una reverencia hacia el suelo.

Museo de Roca al Mare ESTONIA

Me dio la impresión de que esas cañas eran más gruesas que las de centeno

Si les gusta que les hagan fotos, además realizan unas coronas de juncos que venden a los visitantes.

Gruta de Gutmanis.

Como hacía calor era agradable mojar los pies en aguas del Báltico.

Interior del Palacio de Rundale

Tenían buen gusto los zares a la hora de dormir.

Jardines del palacio de Rundale.

Menos la flor violeta todo estaba bueno.

La Concha, aquí se organizan los festivales musicales de Tallín. Dijo la guía que habían llegado a congregarse hasta 300.000 personas y fue el escenario de la revolución cantada que les llevo a independizarse de Rusia.

Castillo de Trakay


Cruz de la independencia letona en Riga

Parlamento lituano
Colina de las cruces en Siauliai.

En el museo de Roca al Mare
Tallín
Iglesia de madera en Vizdmede en el parque del río Gauja
Esto lo hacía yo con 10 años en el corral, teniendo como público al mulo y a los cerdos. Como baquetas cortaba dos trozos de la vara de arar de mi padre y por tambores la tajuela de lavar de mi madre y las calderetas de plástico y hojalata con la lata de echar pienso al mulo, y vaya si me lo pasaba bien ante un público tan permisivo.
Playa de Jurmala, llena de gente y con escenarios en los extremos, donde se escuchaba un grupo en un lado y en el otro un Dj.
Interior de la Iglesia de San Pedro en Vilnius
Bajo estas escaleras yace el celebre Mikolas Kazimieras Pacaso

Curioso asiento en un parque de Vilnius LITUANIA





1 comentario:

Manuel dijo...

Gracias, por estas escapadas tan mágicas y cómodas, en las que nos lleváis con vosotros. Como si hubiéramos estado. Además con el amplio y magnífico álbum de fotos que incluyes, podemos decir: Qué bien lo hemos pasado, cuánto hemos disfrutado en este viaje.
-Manolo-