Simulacro fuga de cloro

No todo en la vida es literatura, como bien sabéis. Este viernes en el trabajo hemos realizado un simulacro de accidente: Fuga en un tanque de cloro. Que jamás será igual a la realidad; quiera Dios que no suceda nunca. El cloro se almacena en un tanque con forma de hipopótamo y desde ahí se reaparte a los diferentes depósitos nodriza que hay dispersos en la red de aguas, tanto en la ciudad como en los barrios y urbanizaciones periféricas. El simulacro lo realizamos con agua coloreada con un tinte que le daba aspecto real de cloro.

Aquí, en Tarragona, hay un teléfono de emergencias que redirecciona las llamadas de cualquier percance. Por desgracia, esta ciudad está rodeada de un amplio complejo petroquímico y estos ensayos se efectúan el fábricas y lugares de posible riesgo.

Mis compañeros se divertían realizando el experimento. Todo estaba controlado en un protocolo elaborado con los de Riesgos Laborales en el que se fijaban los pasos a seguir.

Un operarió "descubrió" la fuga en el tanque, me llamó, avisé a los compañeros que trabajaban en el laboratorio para que permaneciesen confinados con las puertas y ventanas cerradas. Luego al 112, me pusieron con el jefe de bomberos, le detallé lo sucedido y el producto vertido, la capacidad del tanque y el cubicaje de la fuga, se pusieron en marcha (sin sirenas para que no cundiese la alarma).

A través del móvil localicé a mis compañeros para que acudiesen a solventar la anomalía (realmente estaban esperando mi llamada en un descampado próximo al escenario del simulacro, lo mismo que uno de los camiones que estaba en un pinar alejado en torno a los quinientos metros). Fue divertido. Adjunto foto (soy el de la chaqueta roja y casco blanco) y video.